"SLUMDOG MILLIONAIRE"
Escrito por:
Srila B. A. Paramadvaiti Swami
Esta famosa película ganadora del Óscar, es otro ejemplo de engañar y desencaminar al mundo hacia la adoración del dinero y del ateísmo.
Producida con mucha pericia, profesionalidad y de una manera extraordinaria, amena y entretenida, esta película únicamente produce sentimentalismo y codicia.
El héroe dice: “si no fuera por Allah y Rama mi madre no estaría muerta.” La violencia entre los Musulmanes y los Hindúes ha sido incrementada debido a las políticas Británicas de dividir a India. Y ahora Gran Bretaña produce una película responsabilizando, echándole la culpa a Dios de todo este tipo de violencia.
El hombre se está metiendo en problemas cuando se desvía de la moralidad enseñada por las verdaderas enseñanzas religiosas.
Sí, el dinero es la razón por la cual el hombre lucha en las guerras. Sea en Irak o en cualquier otra parte, los seres humanos asesinan a otros seres humanos por codicia y solamente por eso: codicia. Y éste es el aspecto emocional de la película; las escenas emocionales se basan en la codicia. Vuélvase rico fácilmente. Tenga suerte. Sea audaz, sea atrevido. Acepte riesgos. El bribón de los tugurios tiene suerte. El productor, que desea deshacerse del muchacho, lo engaña, lo tortura para evitar pagarle, y ni siquiera es castigado. Tal como ocurre en el mundo real. Los maleantes, los sinvergüenzas ganan y permanecen en el poder. Pero un pícaro de la calle, un muchacho pobre de los tugurios, tuvo éxito y pudo unirse al círculo de los ricachones, de aquellos que están podridos de dinero. Respecto a los mendigos que son abusados: Déjenlos permanecer en sus barriadas miserables, en sus tugurios, mientras los productores de la película siguen concurriendo a esquiar a San Moritz y haciendo viajes de placer a costa de ellos.
Es mejor comprender acerca del karma y entender la real necesidad de seguir principios morales, ya sea que usted es una persona pobre o una persona rica. Solamente eso puede salvarnos. Los Vedas nos muestran estos valores de amor universal.
B. A. Paramadvaiti Swami